5 Tipos de mujeres que debemos evitar como amigas

Las mujeres tenemos muchas amigas. Unas maravillosas, otras no tanto. Lo que sí debemos tener presente es que hay ciertos tipos que debemos evitar por el bien de nuestra paz mental y espiritual.

 

5. La Eneamiga

Todas tenemos una de estas. Las eneamigas son esas chicas que se hacen llamar de amigas de frente y cuando damos la espalda nos traicionan de la primera. Usualmente existe una energía incómoda a su alrededor, por lo que detectarlas es bastante fácil. Nosotras merecemos amigas de verdad, no amistades a medias. O es amiga o enemiga, pero los intermedios, no ayudan.

4. La Víctima

Ella solo nos llama cuando le sucede algo malo, que es bastante seguido porque siempre es la damisela desesperada que requiere de ayuda e intervención divina. Ella vive un eterno viacrusis y a su lado, el sufrimiento de Jesucristo es nada. Debemos evitarla porque esta persona nos consumirá demasiado tiempo solo rescatándola y atendiendo sus constantes desgracias. Si no la dejamos a un lado, nos convertiremos nosotros en víctimas de su martirio manipulador.

3. La Jueza Implacable

Esta mujer no pestañea dos veces para juzgar cada uno de nuestros actos. Si nos llevamos a un hombre en la primera cita, somos unas depravadas; si nos hacemos las difíciles, somos unas tímidas idiotas. Con ella no importa lo que hagamos siempre estará mal porque a ella solo le gusta emitir juicios valorativos en nuestro detrimento. Con amigas así, es mejor desentenderse porque ante sus ojos siempre seremos culpables.

2. Miss Negatividad

Esta mujer siempre tiene una nube negra y un trueno sobre la cabeza. Sabemos que se aproxima solo de escuchar el huracán de negatividad que la acompaña. Ella no solo se ahoga en un vaso de agua, quiere que nos ahoguemos con ella. Por ende, debemos manejarla con cuidado para evitar contagiarnos con su energía. Es mejor alejarnos porque de lo contrario perderemos la alegría de la vida.

1. La Srta. Perfecta

Siempre que nos llama o nos visita, esta mujer en la que Dios demoró más tiempo en crear, según ella misma, se esmera en dejarnos saber lo bien que le va en la vida. Su novio es perfecto, su casa es perfecta, su perro es perfecto y sí, hasta la manera de jactarse es perfecta. ¿Por qué debemos evitarla? Pues porque su presencia solo nos recuerda todo lo malo de nuestras vidas y para agravar aún más la situación, no es una persona real en la que podamos confiar porque para ella lo más importante es su imagen, no la realidad.